Por América Guadalupe Olachea Torres
Que sensación tan fascinante surge desde que mis ojos te encuentran. Me emociona que entre varios ejemplares mi intuición me acerque especialmente a ti. Quiero conocerte, no lo pienso más. Siento que otra persona puede interponerse entre nosotros y estiro mi mano para tener contacto físico contigo y hacer evidente mi interés por ti. Puedo palpar que se acercan momentos majestuosos entre tú y yo. De antemano sé que durarán poco–y lo entiendo–en la vida los momentos más placenteros son efímeros. Tierna y cariñosa toco tu cuerpo y empiezo a fantasear la fugaz aventura que se avecina entre los dos. Primeramente, dejo correr agua fresca sobre ti. Acariciándote sugestivamente, te veo y te siento fuerte, afable, maduro, en tu punto. Sin duda estás en la flor de la vida, hasta parece que estuvieras sonrojado y eso me agrada aún más. Reconozco que cada instante que pasa eres más apetitoso para mí. Seco tu cuerpo cuidadosamente para no maltratarte y sin más te dejó caer sobre un sitio que te cobijará y me permitirá deleitarme. Poco a poco te quito lo que cubre tu exterior, aunque tu vestimenta es original y de buen gusto, sé que lo mejor está en tu interior. Te pones quejumbroso y eso me hace batallar un poco para desvestirte–te susurro cosas bonitas con mi voz melosa– y vas cooperando dejándote despojar de todo lo que estorba. De pronto te tengo frente a mí en tu mejor ángulo y totalmente dispuesto a participar en lo que ya sabes sucederá. Lo intuiste desde que sentiste por primera vez mis manos sobre tu cuerpo. Te veo tan hermoso, jugoso y carnoso. Sinceramente logras inquietar todo mi ser. El tiempo es oro así que, sin más, acercó mis labios temblorosos hacia ti. Tiernamente te doy varias mordidas. Eres dulce como la miel. Me enloquece tu olor y tu exquisito sabor. Siento cómo se aceleran mis palpitaciones y eso me lleva a saborearte apasionadamente. En esos momentos llego a la parte más íntima de tu ser, la que otorga vida y posibilita a la posteridad poder contar con dignos ejemplares como tú. Succiono hasta tu última esencia. No quiero parar de hacerlo. Pierdo la cordura y mis caricias se vuelven ásperas y bruscas, casi muero del susto pues estuve a punto de que resbalaras de entre mis manos. Me controlo y bajo la intensidad de mis expresiones de amor. Reconozco que mi experiencia es más placentera de lo que imaginé. Me fascinas, sabes delicioso ¡y mira que he saboreado a muchos de tu tipo! Pero tú, ya ocupas un lugar especial en mi vida. Será difícil que alguien logre superarte. Después de nuestro amoroso pero desgarrador encontrón. Me siento feliz. Dibujaste en mí una sonrisa de oreja a oreja. Quedo absorta por unos momentos recordando la sublime vivencia. Regreso a la realidad. Debo lavarme. Tus dulzuras dejaron huellas en todo mi rostro y manos. Hasta mi blusa debo cambiar. Hay vestigios tuyos en ella, pero el momento vivido vale eso y más. Al concluir nuestra aventura te agradezco y me despido. Me siento satisfecha y quiero descansar unos momentos para proseguir con mis actividades diarias. Seguramente dormiré como una piedra. Reconozco que pensaré en ti–al menos mientras llega el próximo encuentro romántico con otro como tú– con otro mango, sin duda, mi fruta favorita. América Gpe. Olachea Torres La autora ama entrañablemente su estado de Baja California; nacida en el bello puerto de Ensenada, forjó sus estudios en Mexicali, su ejercicio laboral se ha edificado en Tijuana, su amor entrañable lo tiene en Tecate y vive actualmente en Playas de Rosarito. Tiene casi cuatro décadas de dedicarse a la docencia en el nivel de primaria, donde ha disfrutado enormemente ser profesora de grupo, directora y actualmente supervisora escolar. Le gusta soñar e imaginar –por ello siempre– ha encontrado en la lectura y en la escritura; una forma de expresarse y deleitar su espíritu conspirador y bohemio, tocando cualquier tema o sentimiento de los incontables que habitan en el ser humano.
0 Comments
Leave a Reply. |
Escritor invitadoEn esta sección tendremos escritores invitados que compartirán su labor literaria con nuestros lectores. Archives
November 2024
|